sábado, julio 23, 2016

ESPLÉNDIDO LANZAMIENTO DE NUEVO LIBRO DE HISTORIADOR DE PENCO BORIS MÁRQUEZ


NOTA DE LA EDITORIAL: El texto de el presente post fue redactado por Jaime Robles Rivera, presidente de la Sociedad de Historia de Penco.
Boris Márquez, autor del libro se dirige a los presentes; en la testera, el prologuista e historiador penquista Armando Cartes Montory.
El pasado miércoles 20 de julio, fue un día frio y lluvioso, como lo es casi todo el invierno penquista. Pero en horas de la tarde de ese día, a pesar que el clima seguía igual de hostil, penquistas y pencones nos dimos cita en la Biblioteca Municipal de Concepción para acompañar a nuestro coterráneo Boris Márquez Ochoa, al alumbramiento de su tercer hijo de papel y tinta.
Su primer libro lo dedicó a los albores de la cerámica y la loza de Penco, el segundo nos permitió hacernos una idea cabal del inmenso aporte del naturalista e investigador Carlos Oliver Schneider; ahora se completa el relato de su primer trabajo al llevarnos en un notable recorrido por la cerámica decorativa de la más alta calidad, cuyo origen no podía ser otro que el de los hornos de Penco.
Una muy buena concurrencia tuvo el lanzamiento del libro del historiador pencón, Boris Márquez Ochoa.
"Las Piezas del Olvido: Cerámica decorativa en Penco 1962 - 1995", que así se titula este último trabajo de Boris, fue presentado en sociedad en emotiva ceremonia. No podía ser de otra manera, ya que este libro es el resultado de la generosidad no solo de su autor, quien ha vertido en su creación un valioso tiempo y energías, restados a su familia, que responden a ello con infinita comprensión y apoyo.
Digo generosidad no solo del autor, porque al recorre las páginas finamente ilustradas y de una calidad gráfica que ya se lo quisiera cualquier publicación, podemos reparar en que fueron no pocos quienes pusieron a disposición de esta aventura, sus más queridas piezas de cerámica, atesoradas porque son valiosas en sí mismas por ser objetos difíciles de pesquisar, y en la mayoría de las veces, porque son muy estimados testimonios de cada familia locera, que van pasando y siendo ofrendados de generación en generación. Además antiguas loceras y antiguos loceros entregaron sus relatos, recuerdos cargados de añoranza de tiempos que sin ser probablemente mejores, si fueron plenos de satisfacciones. Agradecemos a estos alfareros que ceden en sus memorias, parte de lo que hoy marca la identidad de nuestro Penco.
Boris Márquez en plena intervención durante la ceremonia.
Fue más de un centenar los concurrentes al lanzamiento del libro referido, quienes recibieron los saludos a su llegada del propio Boris Márquez. Luego ya iniciada la ceremonia primeramente hace uso de la palabra Jaime Robles Rivera, en representación de la Sociedad de Historia de Penco, puesto que Boris es socio de dicha institución, destacando en su discurso la prolífica producción editorial del autor y con gran proyección por cierto, dada su juventud.
Seguidamente pasa a presentar la obra propiamente tal "Las Piezas del Olvido: Cerámica decorativa en Penco 1962 - 1995", el prologuista del libro, destacado historiador del Bio Bio, Armando Cartes Montory, quien dentro de su exposición hace notar la importancia del libro para poner en valor piezas que son únicas, y que superaron en mucho a sus similares de la época. Armando indica que una vez aparecido el libro, su titulo pierde sentido, ya que a partir de ahora, la cerámica decorativa de Penco, no son piezas del olvido, pues será imposible olvidar lo que ha quedado perpetuado en bellas y técnicamente muy bien logradas fotografías. Cabe aquí referir el notable aporte de Siegfried Obrist, quien es el responsable del diseño y grafica del libro, gran trabajo.
Seguidamente, le corresponde al propio Boris Márquez Ochoa dirigirse a la audiencia, para compartir su alegría, son palabras llenas de emoción en las que refleja el apego a su tierra natal, Penco. Comparte esta nueva satisfacción con su señora Nicol, y con sus tres pequeños hijos, Millaray, Martina y Agustín. Aún más emotivo el momento en que le dedica este trabajo a su madre, y el público se hace cómplice de esos sentimientos con un espontáneo aplauso.
Las palabras de Boris avanzan, se entusiasma, se distiende, muestra un relato entretenido, con matices, además de historiador, es un buen comunicador. Estas palabras también van haciendo compromisos, por seguir la senda de la investigación en torno a Penco y su historia. Satisfechos y expectantes por lo que vendrá, quedamos quienes oímos este prometedor anuncio.
En este reflote de la obra locera, Boris ha encontrado los mejores aliados, tal es el caso de los trabajadores loceros, los de hoy y los de antaño. Su anterior publicación dedicada al tema fue presentada hace ya dos años, en el Hogar Sindicato Industrial Fanaloza, el que en Penco siempre lo referenciamos como “el que está al lado del río”. Pues bien, su actual Presidente, Don Luis Ascencio, también quiso dedicar unas palabras a Boris y su trabajo. Muy agradecido se mostró con todo lo que se ha logrado en estos años de refrescar la memoria a través de los libros, y otras acciones emprendidas al alero de la Sociedad de Historia de Penco. Don Luis, hacia el final de sus palabras, pidió a Boris Márquez acercarse para recibir un obsequio, que no podía ser otro que uno nacido de la arcilla; un plato de loza conmemorativo, bellamente decorado con una imagen de la fábrica Fanaloza de los años 40. Significativo es que la leyenda del plato consigne que es un obsequio de los “veteranos de Fanaloza Penco”; Veteranos cuales sobrevivientes de una contienda de la que otrora resultaran victoriosos. Que fuerte este concepto, pensando en la responsabilidad de los loceros jóvenes, herederos de este legado.
Finalizando este muy evocador encuentro, Boris quiso hacer un justo homenaje a distintas personas que colaboraron en su trabajo, la mayoría presentes en ese momento, otros cuya partida se adelanto al nacimiento del libro. Así pasaron adelante y recibieron un ejemplar dedicado con sentidas palabras,  los pintores y decoradores Pedro Retamal, Sergio Barra, Ana Oñate, Gastón Delgado, Grace Zuchel por su padre Roberto, Ingrid Merlot por su esposo Roberto Benavente y Mary Mejías fundadora junto a su esposo Hernán Díaz Roni de Cerámica San Juan.
Boris Márquez, al centro de la foto; a la derecha, don Nicanor Ascencio ex trabajador de Fanaloza y Luis Ascencio, presidente de la Federación de Trabajadores Loceros.
De esta manera llegamos al punto final de la presentación de "Las Piezas del Olvido: Cerámica decorativa en Penco 1962 - 1995". Debo decir que de las muchas presentaciones en la que he participado, ésta me pareció especial, marcada por la emoción, por la evocación y el redescubrimiento y puesta en valor de un orgullo pencopolitano, la cerámica decorativa de Penco.
Un galardón de origen locero
recibió el autor del libro.
Un abrazo nuevamente para Boris Marqués Ochoa, un abrazo cargado de expectativa, en la nueva producción editorial que pronto nos regale, para traer al hoy, los testimonios de la historia de quienes ayer fueron los cimientos de nuestro pueblo y de la ciudad que hemos construido, este Penco que sorprende al leer su andar de tantos siglos.



1 comentario:

Unknown dijo...

Hace unos días atrás,se realizó en el "Hogar sindicato Industrial Fanaloza" de Penco,la presentación del libro " las piezas del olvido" del joven autor de dicha comuna, Boris Marquez ochoa y en donde tuve la oportunidad de estar presente junto a ex compañeros de labores y a los cuales conocí en mis primeros años de labor en nuestra historica industría locera; muchos de ellos ya de avanzada edad y lento caminar (entre ellos mi padre), pero que a pesar de ello, quisieron estar presentes una vez mas reviviendo su pasar a travez de las palabras del autor, pero también(para sorpresa de todos los presentes), retrocediendo en el tiempo con las imagenes del extraordinario documental, prolijamente preparado por don Nelson Palma,el cual, al igual que todos los demas trabajos realizados y destacados por él,de los diferentes ámbitos y personas de nuestra comuna, quedará en la historia de nuestra ciudad.Fue una jornada muy emotiva que quedará almacenada en nuestras memorias y corazón.
A todos y cada uno de quienes hicieron posible tan inolvidable momento...muchisimas gracias; Que Dios les bendiga.