jueves, agosto 06, 2020

LA PELEA POR SALVAR LA BAHÍA Y LOS CERROS DE PENCO

 OPINIÓN:


        Que haya en Penco personas o grupos de personas que defiendan la bahía, los cerros, el agua del estero, en general la naturaleza, es un asunto que va más allá de simples protestas. Es la conciencia colectiva que valora el entorno, lo quiere, lo respeta y desea mantenerlo, por tanto, merece nuestro respaldo. Y de otro lado están las empresas que buscan generar riqueza interviniendo y alterando el medio natural que además es muy frágil.
           Hay a lo menos 3 razones muy fuertes detrás de este conflicto de la ciudadanía frente a las empresas cuya dedicación es instalar un terminal de gas en la bahía y la explotación de mineral estratégico en el fundo El Cabrito. Analizaremos esta controversia con criterio científico para comprender mejor.
           La primera razón es la economía o, mejor dicho, el capital. Lo que buscan las empresas es generar riqueza y aprovechan cualquiera oportunidad para conseguirlo. A primera vista se ve razonable. Sin embargo, este principio de racionalidad de aumentar la tasa de ganancia se vuelve irracional porque es ambientalmente destructivo. Está probado en todo el mundo, y todos lo pueden ver: las montañas de basura producida por la industria, la tierra irremediablemente destruida por la explotación de minerales, el mar vacío por la pesca indiscriminada y la contaminación. O sea, vamos directo al abismo, al suicidio. Entonces esta es una causa, sino LA causa, del rechazo a que estos proyectos sigan adelante. Los habitantes de Penco intuyen y saben que hay que detener esta lógica, que la economía por sí misma ya no es capaz de parar. Al capital se le cortaron los frenos. Se hace necesario plantear una economía de otra manera.
        Una segunda razón de la lucha pencona contra la lógica del capital es de tipo estético. Y entendemos la estética como una emoción de alegría frente a la vida. Ahí radica el estímulo que proviene de la naturaleza y que en nosotros se traduce como la vibración de la belleza. Entonces comprendemos que los pencones y lirqueninos quieran preservar la belleza de la bahía, ya bastante congestionada, porque cualquier proyecto de la envergadura de la gasífera cambiará eso irremediablemente. O sea, sería una pérdida que todavía se puede evitar. Porque decíamos que el capital sólo quiere ganancias no le interesa la estética. Además, la defensa que hace la gente tiene que ver con lo que los griegos llamaban el telos: eso de dejar que la naturaleza sea y se realice en su fin. Lo opuesto es interrumpir ese fin con el abuso. Lo mismo aplica para la extracción de mineral en los cerros. Es la destrucción de todo el delicado sistema ecológico. Las salvaguardas que la empresa dice emplear son contradictorias. La lucha también es estética.
          Y la tercera razón de este conflicto, es moral. Conseguir detener la destrucción del medio ambiente si la empresa logra los permisos para montar toda la infraestructura de explotación que necesita, es una pelea ética. ¿Cómo no va a ser ético luchar en favor de la vida? De este modo, la postura social de los pencones contiene un principio justo que es innegablemente moral. El capital trabaja como si el planeta fuera infinito, pero es finito, o sea, hay límites. Por un lado con la explotación irracional los recursos se acaban y por otro, la actividad económica produce contaminación, basura inmanejable y destrucción de la que no nos podremos recuperar. Los movimientos pencones que están en esta lucha deben tener claro que pelean contra el poderoso capital, pero que los ampara la moral y la estética. Hallar una forma moderada, equilibrada y humana para construir una economía es un desafío. Y, lamentablemente, la respuesta nadie la tiene. Esto es como el virus no hay remedio ni vacuna, estamos expuestos. Así nuestra única esperanza es tratar de pisar el freno, es lo que está intentando la sociedad pencona.
                                                                                                                     EL DIRECTOR

1 comentario:

Unknown dijo...

Hola Buenas tardes, me gustó el blog, muy bien realizado.
Me gustaría saber donde poder escribirte directamente.
Saludos
Natalia Urrutia.