domingo, abril 15, 2012

LAS MOTOSIERRAS ECHARON ABAJO EL BOSQUE DE PENCO

Érase  una  vez  que  Penco   tenía  un lindo bosque de añosos pinos color verde botella, que se habían convertido  en  el fondo visual de su balneario. La vista terminaba allí en la loma donde se levantaban silenciosas   dichas  coníferas.    Su  quieta  y  bondadosa  presencia estaba en mente de miles de personas. Pero, de súbito, la realidad se hizo distinta.

Una empresa contratista pagada por el SERVIU, propietaria de ese espacio, comenzó a cortar los árboles del clásico bosque de Penco, terminando sin justificación aparente con el perfil verde tan característico de la comuna. La autoridad insensible no paró el decreto emanado de funcionarios también insensibles que dieron curso a las motosierras. Están condenados los cien pinos que resistieron por casi ochenta años aguaceros, temporales, trombas marinas y terremotos. Simplemente porque ellos no pudieron contra la firma de una orden emitida desde una oficina en Concepción. Tampoco valió de mucho la movilización de vecinos dispuestos a defenderlos. Quien tenía que aplicar el freno, la autoridad comunal, hizo oídos sordos. La loma donde se emplazan quedará pelada, esperando un incierto plan de manejo que pretenderá --según dicen—controlar la erosión seguida de una reforestación.

Los pencones a la distancia presenciamos con impotencia como caen uno tras otros los pinos que hemos visto allí toda la vida. Cuántas aves se quedan sin sus espacios de descanso: guairabos, jotes y otras especies menores que tendrán que mudarse a otro sitio.

¿Y por qué tanto apuro por talar esos pinos? Porque uno de ellos cayó sobre una casa y el SERVIU para evitar pagar una indemnización, optó por cortarlos todos, teniendo clara conciencia que la mayoría de ellos no constituía peligro para nadie. Y el contratista feliz por ganar dinero apuntó sus motosierras contra la mayoría. Una cosa es la prevención razonable frente a una amenaza y cortar los pinos peligrosos, pero otra cosa distinta es arrasar el bosque completo sin tener en cuenta ninguna consideración como la ecología, la estética y las sensibilidades colectivas. Desde este blog apoyamos a quienes se han opuesto a la tala de los pinos como Víctor Hugo Figueroa y Eric Forcael.

1 comentario:

Unknown dijo...

Felicitaciones por tu Blogger.
Lamento mushisimo que estos arboles que eran parte de las postales de nuestra comuna sean talados, siempre hay alternativas para evitar este tipo de tragedias. Recuerdo que hace unos años atras se hablaba de un parque que se realizaría en ese lugar, Lamentablemente ya no queda nada de eso... Es triste ver como se ha ido perdiendo la identidad Pencona...
Carola